La máxima ingenuidad es creer que somos racionales, la que le sigue, es la de creer que somos complejos.
Lo complejo empieza cuando el individuo entiende que sus luchas no puede librarlas en solitario, pero las claves internas nunca son complejas.
Lo complejo comienza con lo social, las sociedades son las complejas.
La complejidad de lo social se aborda conscientemente, aunque las motivaciones internas sean simples, y algunas se mantengan inconscientes.
La dificultad de volver social, y complicado, y consciente, lo que es íntimo y simple, e inconsciente en algunos casos, esta racionalización forzada de lo que es irracional en gran medida, y nunca deja de serlo, genera un conflicto, y ese conflicto es el que transforma un individuo en persona.
Cuando personas que experimentan los mismos conflictos forman un grupo, se adquiere una conciencia superior, esta conciencia, ahora colectiva, vuelve al grupo susceptible de ser organizado y dirigido.
Lo vuelve susceptible al poder.
El poder consiste en comprender los conflictos, en saber diferenciar en cada uno de ellos, entre la complejidad de lo social y la simplicidad de lo personal, y como relacionar esas escalas humanas eficientemente.
El saber comprender y diferenciar los conflictos, y relacionar eficientemente sus distintas escalas para lograr un fin, viene de una clase de conocimiento que posibilita el desarrollo de poder, y sobre todo, que lo haga siguiendo una voluntad precisa,
como expresión acabada de tal voluntad…
Ese conocimiento es la política.
La política es el conocimiento que permite transformar la voluntad en poder.
31.12.2013
@FBoccanera
La grandeza del venezolano en estas fechas…
Las fechas de la celebración de lo que,
exactamente,
no somos
Y de celebración de lo que, menos que menos, queremos ser…
Porque incluso antes de ser, previo incluso a lo que quisiésemos ser,
nuestros deseos, mejor dicho, nuestros apetitos ansían
dejar de ser...
queremos ser "otros"….
Sí, "otros"… nunca “nosotros”...
Ser otros, y desde luego en otro lugar: allá arriba,
allí arriba,
“Coronando...”
Sólo nos sentimos generosos imaginando esa cumbre,
esa cumbre gloriosa, sintiendo el soplo divino del triunfo...
entonces al fin, con masturbación pública y solemne, procederíamos a derramar nuestra “abundancia”.
No importa que abundancia, no importa cómo llegó ni como vino
(y menos aún importaría que se llegase a saber que…)
Abundancia y Generosidad son opuestas.
Nimiedad…
¡Brindemos!
¡Es en la cumbre donde nos debemos ver!
¡es más! desde la cumbre hasta podríamos atrevernos,
-creyéndonos al fin con valor-
a echar esa mirada tiesamente evitada, sobre lo que no queremos saber
sería la primera vez que, realmente, escogiésemos mirar…
e ipso facto, sería la primera vez que, escogiésemos callar…
mostrando ese “silencio de perdedores” que sólo ocurre en los que al fin entienden…
¡PERO TRANQUILOS!
¡NO SE ENROLLEN!
Pues la chinita, las gaitas, la navidad, las parrandas, las hallacas, los espíritus, los san benitos, el fin de año, los cohetones, los reyes magos, la caña, las rumbas, los culos y los ratones…
Evitaran cualquier posibilidad de silencio…
Evitaran que nos sintamos perdedores…
Si a un microbio se le pudiese preguntar qué opina de todo esto,
diría que somos unos enanos…
@FBoccanera
Érase el país del ruido…
del ruido sospechando del silencio,
del ruido humillando al silencio,
país del ruido, país de sordos
gritando sin parar, entre quienes nada querían escuchar.
torneo de gritos sin voz,
de voces sin aliento
de miradas sin destello
de caras ya sin rostros
de mensajes, otra vez sin destino.
y el país se extravió,
nadie indicó una ruta
nadie sacó un mapa
nadie salió a buscarlo
no se mostró, una sola brújula...
sólo se siguió haciendo de todo,
para que nadie pudiese hacer nada,
hasta que todos los pasos se volvieron imaginarios
y se volvieron en todos esos quejidos
de paralíticos,
que nunca se contentaron, hasta detenerlo todo.
por fin, cansados de no servir a nada
todos los caminos se ausentaron de la comarca
hasta las calles al final se fueron…
en algún momento se sabrá que,
el país del ruido estaba despoblado,
desde hacía años...
los últimos, fueron vistos en el desierto
disputándose en el arenal las marcas de sus orines
aupados por multitudes que les gritaban desde dentro...
sobre sus carcasas, vueltos jirones
se enredaban estandartes desteñidos.
aunque bastaría una fibra
sólo una.
@FBoccanera
Esta es mi opinión de lo ocurrido en las elecciones municipales:
La participación, alineada con lo que históricamente se registra para este tipo de elección, es de por sí un fracaso, pues se logra a duras penas un 59% a pesar del fuerte acarreo chavista, y la intensa campaña plebiscitaria (polarizante) del caprilismo.
Esto podría indicar que se llegó a un tope en la eficacia populista de campañas groseramente basadas en: a) reparto material directo, b) dominio del puro mercadeo político con fuerte énfasis mediático, y sobre todo: c) campañas lideradas por algún “portaaviones” más o menos carismático (más o menos escorado en la actualidad).
La ausencia de propuestas programáticas o su baja calidad, o poco poder persuasivo, ya ni siquiera se señala como causal de fracaso, lo que indica un deterioro profundo, un deterioro decadente-terminal de la actual clase política -de lado y lado- y de sus extensas constelaciones formadoras de opinión.
El chavismo se mantiene claramente adelante, incluso aumentó su ventaja porcentual respecto a las presidenciales y esto es así, saquen la cuenta que saquen… pero es muy interesante el hecho de que perdió algunas grandes ciudades (incluyendo 6 capitales de estado), a pesar del reparto masivo de bienes de consumo y la intensa movilización callejera de Maduro y su ejecutivismo ramplón: habría que analizar si el descontento urbano aumenta a mayor velocidad que el “foráneo”, o sea, si la caótica gestión chavista se siente más en las grandes ciudades, o porque es en esas ciudades, donde realmente se despliega la oposición y se siente de alguna forma su presencia.
A lo mejor, es simple incapacidad de un movimiento como el PSUV que es tanto o más carente que la oposición, a la hora de levantar, promover y lanzar liderazgos, liderazgos genuinos que no sean emanaciones cupulares.
La oposición oficialista secuestrada por la MUD en su única expresión caprilista, sin otro trabajo “político” que el de mercadear proyectos personalistas, volcada a la sola conquista de parcelas clientelares, y privada de medios de comunicación sumisos, de nuevo claudicó feamente en la provincia: su avance fuera de los perímetros urbanos sigue siendo escaso, el activismo MUD es francamente flojo cuando debe penetrar en la entraña territorial, algo que sin embargo, no parece preocuparlos, a pesar de que ya no tienen partidos nacionales: la MUD es una heterogénea federación escasamente coaligada de figuras locales de irregular proyección (situación promovida a su vez por la cúpula trinitaria caprilista-lopecista-machadista que es la única con voz, al ser la única proveedora de los escasos recursos que se consiguen, más allá de lo que se raquetea en los cotos regionales)
AD ya no existe (no interesa a nadie, pero hay que señalarlo)
La enajenada estrategia caprilista de plebiscitar la elección no sólo fue un completo fracaso, y le regala a Maduro un triunfo desproporcionado a su innegable pobreza como líder, sino que expone una carencia de percepción grave, incluso disociación flagrante, en quienes se supone que deberían estar en contacto continuo con el “pulso nacional”.
Una vez más, se demuestra que una evaluación negativa de la gestión chavista, de paso percepción en aumento, no se traduce necesariamente en una disminución proporcional en el apoyo a su gestión, esto indica que la alternativa sigue sin ser visualizada, o en todo caso, que sigue sin convencer más allá de los convencidos naturales… esto a su vez debería llevarnos de una vez por todas, a la conclusión de que el mercadeo político tiene un claro límite, más allá del cual debe haber política nacional, partidos democráticos, y activismo real en acción, trabajando… en vez de agendas privadas, laboratorios particulares y productos personales celebrando preventas.
Existe un tercer polo que ambos extremos se cuidan mucho de señalar, porque la miniaturización política sólo admite un microcosmo bipolar, de hecho, todo el análisis del establishment, graciosamente lo sigue sobrevolando…
Eppur si muove…
…………………………….
ANEXO:
Perdieron su única alcaldía en la capital, con una candidata cupular que obtuvo menos que el PSUV: eso se llama dejar de existir...
AD no fue un partido nacional, fue EL PARTIDO DEL PUEBLO, y no sé si se puede rescatar: hacen falta heroicidades que nunca son comunes.
COPEI es una tragedia política: fue asesinado por su padre y sus hermanos en vez de salvarlo, se pusieron a fundar nuevas tribus perdidas
Voluntad Popular será partido nacional el día que tenga un plan político que no esté supeditado a la agenda de Leopoldo López
Primero Justicia no puede ser partido nacional porque ni siquiera es un partido, es una agencia de mercadeo y publicidad
Un Nuevo Tiempo perdió su gobernación bastión y no ha perdido su alcaldía capitalina por una manipulación del régimen, pero su proyección se estancó hace rato...
@FBoccanera
La palabra como verbo, desaparece por épocas
vivimos en una época así
época de palabras traicionadas…
terminará, cuando los gritos se unan con los silencios
Ya regresaran las palabras, sus portadores ya fueron elegidos
Cuando ellas salgan de ellos, lo sabrán
Lo sabremos…
(*al poema “La Palabra” de Nikolai Gumiliov, en http://nancyarellano.com/)