Estimado Joaquín, lo que pasa es que todo se vuelto guerra,
eso que insisto en llamar “guerra irrestricta”, es la guerra como la concibe el
totalitarismo cultural (fase superior del marxismo cultural, de la hegemonía cultural,
y de cualquier otro “cultural”).
Ya me meteré con ese tema, el totalitarismo cultural es el
triunfo resplandeciente del progreso sobre la humanidad, pero antes debo
despachar la cuestión de la izquierda asocial y del neoliberalismo progresista, el conjunto que constituye la intelectualidad orgánica y la clase dirigente única del
globalismo.
Volviendo al tema, todas las formas de guerra es lo que estamos
viviendo, estamos sumergidos en una guerra contra “lo que somos”, y esta matrix
en instalación acelerada, necesitada ahora de un “reset” para completar el
proceso, debe ridiculizar cualquier trinchera de combate que hayamos escogido
nosotros, los humanos.
(Porque de eso se trata, de ridiculizarnos en forma
constante, no somos “deplorables”, somos “ridículos”)
El totalitarismo iluminado, como cualquier totalitarismo, no
es otra cosa que estado de guerra permanente, por lo tanto, cualquier “complejo”,
incluyendo el “político industrial” es bélico, en este sentido el complejo
industrial-militar se podría ver como una etapa de transición, que comenzó cuando
se pasó del país del welfare embrionario al warfare state, que ocurrió
justamente en oposición al intento de welfare de los años de FDR.
FDR es combatido tal cual como si se tratase de fascismo
americano, (“FDR admiraba a Mussolini” afirman los “libertarios”), por lo
tanto, el globalismo no es de segunda posguerra sino de primera posguerra (“¿desea pleno empleo para el
pueblo, Señor Roosevelt? Pues lo lograremos fabricando armas”).
Pero el
objetivo último de los “complejos americanos” es la privatización del Estado,
solo posible mediante su transformación en una empresa que responde a intereses
particulares y no a la “voluntad popular”, si hay algún país en donde este paso
puede ser corto, son los Estados Unidos, de hecho, se ha logrado en gran parte
con eso que llaman el “Deep State”, que transforma la democracia en una tiranía
de emperador invisible.
Aquí lo
que cabría discutir es: ¿Qué es “lo industrial” en los Estados Unidos? en el país
donde el gasto público es el generador de “innovación”, pues sin gasto en
defensa no hay industria militar, sin industria militar no hay industria informática
(no hay “big tech”), y a partir del 2008 nos encontramos con un país que
auxilia generosamente, mejor dicho, en forma ilimitada, a los “too big to fail”,
privando a las clases medias y trabajadoras de otra porción del “American Way
Of Life”: my home.
Esto ya
no es capitalismo para los amigos, esto es socialismo para los ricos. Los magnates
de las grandes tecnológicas no se hicieron a sí mismos (no son los self made
man del American Dream), lo cierto, es que no existirían sin una
masiva transferencia de riqueza del pueblo (contribuyentes) hacía un Estado
privado (corporación de corporaciones que hasta se podría decir que funciona
como un banco, lo cual no sería ni tan malo, si cumpliese una función social).
Por lo
tanto ¿no será más bien que lo que tenemos es un “complejo plutócrata industrial”?
Lenin
dijo que “los capitalistas nos venderán la soga con la cual los ahorcaremos”,
pues bien, en los Estados Privados de América, el pueblo le pasa dinero a las big
tech que lo volverán un esclavo.
Lo que pasó en la Corte Suprema no debería sorprender a
quienes nos siguen, este servidor, ha repetido hasta la saciedad que:
1. El camino legal siempre es una vía estrecha, llena de
curvas y en subida, la justicia es una rareza, casi un milagro. La dama ciega hoy
en día es un recurso de mercadeo.
2. No habrá solución institucional a la crisis, gane Biden
o gane Trump.
El poder judicial está sobrevalorado, no es democrático como
el legislativo y no tiene un jefe o equipo ejecutivo que concentra la responsabilidad,
este poder intocable es el hábitat perfecto para mafias y tribus en todo el
mundo.
Desde luego, el poder judicial es SIEMPRE el primero en ser
secuestrado por los sistemas de poder, es el garante del Deep State, y de paso,
y de lejos, es el poder más fácil de comprar.
La palabra “juez” siempre despierta en mí, una imagen nada
positiva, más bien tenebrosa.
También en mi último War Room invité a la prudencia en las
expectativas, esto no es un “Video Game” titulado “Patriots”, seamos serios,
seamos adultos.
Si he trabajado el escenario “Biden presidente”, es porque siempre
lo he considerado posible, y desde hace unos días, el más probable.
Mr. Caos, recuerden en todo momento quien fue el verdadero
ganador de estas elecciones.
Secesión: “Only Time Will Tell” decía Asia, queda por ver si
estas son las elecciones de 1860, y hay un candidato Lincoln.
En los EE.UU. se habla de que la verdadera fecha límite es el 20 de enero, bien, para que esto sea así debe ocurrir algo que ponga al sistema legal en un verdadero aprieto.
Un evento que obligue a una verdadera emergencia nacional, que sobrepase procedimientos y plazos formales.
A ver, quien subió el volumen? Es una pregunta simple de
responder porque el volumen lo subió el mismo Donald Trump el pasado 3 de
diciembre, al pronunciar su discurso más importante, es cierto que se han
desatado rumores de todo tipo, pero nada se compara, al mismo discurso de Trump,
y al llamado de Trump al pueblo.
Ayer por ejemplo tuvo un rally, un acto de masas en
Georgia, ese no fue un acto electoral, fue un acto político puro, de llamado a
la guerra política, Trump no abandona a su gente, esta energizando a su gente, Señores,
Donald Trump, esta más allá de la presidencia, de la formalidad del cargo
político.
Y hablando de rumores, los que tienen que ver con militares
no han cesado desde hace meses, en junio, hace 6 meses, hice un video cuyo título
es “Ruido de sables en los EE.UU.”, y en septiembre, hice otro video sobre el
tema, aún más inquietante, cuyo título es “¿Revolución de Colores y Golpe
Militar en los EE.UU.”, más abajo en el texto descriptivo puse los links, para
que vean que no hay nada nuevo bajo el sol.
Bueno, me voy a ir con una explicación, la más simple y
corta posible, del porque estos rumores militares en los EE.UU. tienen su
fundamento, sobre todo los relacionados con descontento militar, y aquí no me
voy a referir al descontento de altos generales, o al descontento del pentágono
hacia el presidente Trump, no…
Me voy a referir a otro descontento, mucho pero mucho más importante
y de mucho más volumen...
Bien, desde hace unos años se habla de que los EE.UU. han
entrado en crisis, se habla de “la fatiga imperial” de los EE.UU. que se
manifiesta hacia adentro, en una crisis interna de calidad de vida, la crisis
del American Way Of Life, una crisis social que tiene su base
estructural en la contracción industrial que han experimentado los EE.UU. frente
al resto del mundo y sobre todo frente a Asia, frente a China, Japón, Corea,
etc.
Pero esta decadencia no ha sido solamente civil, también ha
ocurrido un proceso degenerativo en las fuerzas armadas que no es social es
elitista, y es que las fuerzas armadas han sido convertidas en una corporación
mercantil de alta concentración, una corporación monopólica que al empeñarse,
sobre todo en los últimos 20 años, en operaciones de intervención militar de
resultado altamente dudoso, tal como lo afirma el mismo Donald Trump, se ha terminado
por convertir en una institución que más que cumplir con un rol público, con un
rol institucional, de defensa nacional, y policía global, se ha convertido, en
una correa de transmisión de riqueza y poder, que transfiere riqueza y poder
público, poder formal, a dos poderes fácticos privados, a dos factores de poder
privilegiados, que concentran riqueza.
¿Y cómo ocurre esta transmisión de riqueza y poder? pues las
fuerzas armadas, por un lado alimentan a un poder fáctico, el complejo
industrial militar, y por el otro, es generadora de innovación tecnológica que
no se revierte tanto en un empresariado creador de economía productiva real,
tangible, sino que el grueso de esta innovación se revierte en otra
concentración de riqueza que son las grandes tecnológicas, las “Big Tech”
como las llaman en los Estados Unidos.
No hay que olvidar que las grandes tecnológicas no
existirían sin la innovación tecnológica proveniente del complejo industrial
militar, el cual a su vez depende exclusivamente de un gasto que es público, el
gasto en defensa, y por lo tanto se crea una cadena de creación de riqueza
cerrada, cerrada en el sentido que no circula para el bien común, para el bien
de todos: Gasto público de Washington > complejo industrial militar >
innovación tecnológica > grandes tecnológicas, y esta cadena es cerrada
porque es una cadena de acumulación y concentración de riqueza y poder,
divorciada de una producción concreta que pueda proporcionar empleo masivo, y esta
cadena a su vez contiene la perversidad de que es financiada por los
contribuyentes, porque ¿de dónde viene el gasto público?
Y es así como las fuerzas armadas de los Estados Unidos se
han convertido en las artífices de una transferencia de riqueza del pueblo a
las elites, las cuales a su vez no revierten esta riqueza hacia el pueblo, en
cambio la acumulan y la concentran, y este proceso de concentración de la riqueza
genera poder concentrado, un poder concentrado en cada vez menos manos.
Y es por eso que cada vez más, el americano común, no el
privilegiado que vive en las burbujas de prosperidad de la costa este y la
costa oeste, sino el que vive en el medio, en otras palabras, el americano de
clase trabajadora y clase media, se siente cada vez menos identificado con su
gobierno central, con sus grandes corporaciones, en otras palabras percibe cada
vez más el despojo del cual ha sido víctima y el poder acumulado por las
elites, y esto, que está pasando en el mundo civil desde hace décadas, este
proceso de creciente descontento y desconfianza de las masas hacia sus elites,
ha venido ocurriendo también en el seno de las fuerzas armadas, no en los altos
mandos, en la alta oficialidad desde luego, sino en los mandos inferiores, en
los suboficiales y sobre todo en la tropa, y todos estos subordinados provienen
en un 60% de la clase trabajadora y el resto es clase media.
Por lo tanto la fractura civil horizontal, tiene su reflejo
en la fractura militar horizontal, porque la base social de las fuerzas
armadas, finalmente ha percibido lo que realmente implica el cambio que ha
experimentado la institución, y han hecho la conexión entre deterioro del modo
de vida, de la calidad de vida, y el deterioro moral, ético, de la institución
militar, y a esta conexión, ha contribuido mucho el fenómeno Trump, como un
fenómeno político de reconexión del hombre común, con los altos ideales de la
nación.
Y es así como los deplorables, los patriotas, los We The
People, existen tanto en la américa civil como en la américa militar. Y a esto
agréguenle que en los Estados Unidos, existe “el pueblo en armas”, debido a que
la segunda enmienda, determina que no debe haber monopolio de la fuerza por
parte del Estado, en otras palabras, enfrentar la tiranía debe ser tarea de
todos.
Y es así como se va logrando la reconexión entre los
fundamentos de la gran nación americana y su pueblo, es un momento de
revelación cosmológica, en donde el círculo mágico del poder, ha comenzado a
romperse, ha ocurrido una interrupción.
Además, en la base popular de las fuerzas armadas de los EE.UU.
se ha ido acumulando otro descontento creciente, sobre todo en los últimos 20
años, desde Irak, Afganistán, Isis, Siria, Bin Laden, Libia, todas estas
operaciones tienen su lado siniestro que muchos militares conocen bien, ocurrieron
cosas que retumban en sus mentes…
En todas estas operaciones, ocurrieron hechos que nunca han
debido ocurrir, y en donde se sacrificaron vidas, corrió mucha sangre, y no
precisamente la de los altos mandos militares, se trata de historias muy
largas, no me voy a ir con su descripción, y no lo voy a hacer, porque es
posible que estas historias sean reveladas algún día, que creo que no va a ser muy
lejano, y ellos mejor que nadie, sabrán contar la verdad.
Y esta fractura horizontal en las fuerzas armadas, ha tenido
sus afloramientos políticos, el principal es el de Donald Trump, con su
discurso permanente de condena a las guerras sin fin, a las guerras inútiles, con
su deseo permanente de retirar las tropas y que vuelvan a casa, con su crítica
reciente al complejo industrial militar, lo recuerdan? de esa crítica me
encargué en uno de los videos que les recomendé antes…
Pero todo esto viene de lejos, busquen el video del discurso
de despedida del presidente Eisenhower, en 1961 antes de entregarle la
presidencia a Kennedy, en ese discurso, verdaderamente histórico, por primera
vez se hace la advertencia sobre el complejo industrial militar y los “efectos
desastrosos que podría provocar el incremento de su poder”, el cual podría
poner en peligro “nuestras libertades y procesos democráticos”, Señores, están
son palabras textuales, no estoy inventando ni exagerando, por favor busquen el
video de ese discurso, vale la pena escucharlo.
Ahora bien, y volviendo a Trump, además del discurso del 3
de diciembre, y todas las declaraciones que ya les comenté, además, ha estado
tomando decisiones que apuntan en una dirección interesante, las cuales, si nos
ponemos a unir los puntos, podrían llevarnos a una conclusiones muy “sugestivas”
y me refiero a la remoción de toda la cúpula administrativa del Pentágono,
poniendo a un nuevo Secretario de Defensa, y al indulto del general Michael
Flynn.
Pero también deberíamos sumarle a esto, a Sidney Powell, que
aquí aparece justo al lado del general Flynn, porque es su abogada, y de paso,
Powell es también abogada militar, y en estos días tomo la decisión trascendente
de independizarse en su investigación sobre el fraude electoral para poder
actuar con mayor alcance, y cuando me refiero a mayor alcance, podría tratarse
de un alcance que nos lleva hasta la jurisdicción militar, donde ella por ser
abogada militar, puede actuar…
¿Ustedes han oído hablar del CID? el Comando de
Investigaciones Criminales del Ejército de los Estados Unidos? es una
institución interesante, les recomiendo echar una ojeada…
¿Y porque me vino a la mente lo del CID? porque a estas
alturas, se vale preguntar quién está llevando a cabo, por parte del gobierno, las
investigaciones sobre el fraude… ¿El muy reservado William Barr, del
departamento de justicia? ¿O su agencia principal, el muy vacilante FBI? ¿y no
será más bien, que las verdaderas investigaciones por parte del gobierno están
en manos militares?
¿Les parece muy aventurado que estén en manos de militares?
bueno, razonemos un poco: el fraude electoral de llegar a comprobarse en toda
su magnitud, en toda su colosal magnitud, estaría exponiendo tres problemas muy
graves para el Estado, y en orden de importancia son los siguientes:
1. La seguridad nacional, la cual quedaría seriamente
comprometida, de llegar a comprobarse la complicidad de entidades o incluso de Estados
extranjeros en el fraude, por cierto ¿por qué los servidores encargados del
escrutinio electoral se encuentran fuera de los EE.UU.? ¿Por qué “la data” debía
migrar al exterior para ser procesada?
2. Otro hecho grave, la pérdida de confianza en el sistema
electoral la cual equivale, ni más ni menos, a una pérdida de confianza en la
democracia y en todas sus instituciones, esto no es grave, es gravísimo.
3. Lo más importante, lo más crucial, porque equivale a
dañar el fundamento mismo de los Estados Unidos, la Constitución, porque se
podría llegar a comprobar que toda la operación de fraude electoral, es una
violación reiterada, con premeditación y alevosía, de la Constitución de los Estados
Unidos, por medio de toda una organización criminal, una “conspiración” como le
dicen en ese país.
Señores, este un problema de seguridad de estado y de seguridad
de la nación, por lo tanto, podría surgir la necesidad, el estado de necesidad,
de declarar un estado de emergencia nacional, pero, un momento… ¡un momento!…
El 12 de septiembre de 2018, hace 2 años y justamente en la
víspera de las elecciones a medio término, fue declarado el estado de
emergencia nacional en los EE.UU., motivado por la amenaza que podría
representar, cualquier operación destinada a "interferir o socavar la
confianza pública en las elecciones [...] incluyendo el acceso no autorizado a
la infraestructura electoral", incluyendo, posibles "interferencias
extranjeras".
Les estoy hablando de la Orden Ejecutiva 13.848 del
Presidente y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, Donald
J. Trump.
Y esta disposición sigue VIGENTE, lo único que falta es
ejecutarla…
A ver ¿qué será lo que están viendo los militares? seguramente,
están viendo los tres problemas graves que ya les mencioné, eso sin la menor
duda, pero es muy posible que además estén viendo que esta crisis, posiblemente
no pueda ser resuelta por la vía institucional, en otras palabras, y dada la
formación militar, están vislumbrando la posibilidad de un conflicto civil…
¿Saben? la gente y dentro la gente este servidor, se ha preguntado
muchas veces ¿quién está detrás de Trump? ¿quién eligió realmente a Trump? ¿quién
o quiénes lo pusieron al frente de esta cruzada?…
Yo les voy a decir algo, y es algo que me parece cada vez
más posible, y creíble.
Y es que detrás de Trump hay militares, militares activos, militares
patriotas, verdaderos militares que de verdad aman a su país, y no están solos,
no son pocos y faltaría más, no son mochos…
Se repite el evento de las elecciones parlamentarias de
2005, aquella vez, todo el ecosistema del poder y su instrumento, la clase
política única, ante el primer acto masivo de desobediencia civil en la
historia de Venezuela, presurosamente optó por “re-electoralizar” la política.
Por lo tanto esta decisión fue tomada tanto por el Estado chavista
como por su oposición “oficial”, y si existiese conocimiento real de la condición
colonial de Venezuela, se entendería que esta no fue “una decisión soberana”,
pero hoy no vine para hablar de esto.
La impresionante abstención que ayer se volvió a presentar,
como campanazo mudo, es el triunfo del desierto, de uno que nos mostró que el
tiempo se detuvo.
La verdad, es que el tiempo se detuvo en Venezuela hace
años, en el país que tiene un problema no resuelto, con el tiempo.
La abstención ¿es acción o inacción? ¿es activa o es pasiva?
Esta discusión me tiene sin cuidado, porque lo importante es la constatación
del desierto, de un desierto que abarca todos los parajes de la política.
Desde hace un tiempo vengo diciendo que la única posibilidad
de existencia para una verdadera oposición en Venezuela, es que ésta aprenda a
volar debajo del alcance del radar, del radar de lo supuestamente “público”.
Y el “radar de lo público” no es solamente el radar del Estado,
es el radar del sistema, del ecosistema de poderes que incluye a la oposición visible,
a la oposición mediática, sea “oficialista”, o supuestamente “rebelde”, “radical”,
“disidente”.
Si Usted es detectado por algún “opositor visible”, es lo
mismo que hubiese sido detectado por el radar chavista, sepa que debe fingir,
debe disimular, debe huir a la primera, porque el opositor visible, es tan
enemigo como el otro, ni mas ni menos.
El radar de lo público solo se puede entender si se logra
una definición que comprenda que lo público no es “lo mediático”, lo público no
es “lo comunicacional”.
La real esencia de lo público es el conflicto en la
sociedad, lo que algunos definen como “lo político”.
Y lo político no es la política, sin organización “ordenadora
de lo político” no hay política, un acto de abstención masiva no implica la
existencia de la política, la abstención no fue un acto organizado, es simplemente
la única opción que le quedó al pueblo.
Ayer, el radar de lo mediático, de lo comunicacional, no
pudo detectar lo que estaba buscando, ojalá que quienes aspiran a la política
entendiesen que así debe ser todo el tiempo, que la única acción política
posible, por los momentos, es la no detectable.
Los tiempos para actos públicos, grandes y pequeños, de
“desobediencia activa” ya llegarán, mientras tanto ¿alguien se prepara y
prepara a la gente?
Mi pesadilla, es una donde después de “la caída” veo caras
nuevas, si, las nuevas caras de nuevos oportunistas.
En Venezuela la organización política se encuentra siempre con
un obstáculo, que no es la presencia de una “falsa oposición”, esa mas bien facilitaría
las cosas si hubiese inteligencia, por lo menos la inteligencia para ignorarla
y no dedicarle ningún tiempo vital.
El obstáculo sempiterno es la noción del tiempo, una noción
en donde “nunca hay tiempo” o "el tiempo ya pasó", es la maldición
del “yaísmo”, del “esta vez es distinto, y tú lo sabes”, donde el que dice
esto, ni siquiera sabe dónde está parado.
El venezolano no se encuentra peleado con la realidad, si
fuese así la astucia sería una rareza, y más bien a la historia del país le ha
tocado padecer de un exceso de astucia, de la “viveza” como primera
ramificación del gentilicio.
No, la pelea del venezolano siempre es con el tiempo.
Y sin noción del tiempo no es posible tener noción de la
oportunidad, del “timing” para preparar y ejecutar, porque solo el tiempo
permite la percepción del verdadero pulso de la sociedad, que no es solo el
pulso venezolano, es “el pulso de los tiempos”, un pulso universal.
Amigos visitantes y seguidores de este apartado rincón del
espacio-tiempo cibernético, donde el objetivo principal no es informar, sino
poner a pensar para evitar la atrofia de facultades mentales básicas para la
supervivencia.
Hoy voy a hablarles de China y su importancia en este
momento, en este momento decisivo del cual podría surgir un conflicto a escala
impredecible, propio de un fin de ciclo histórico, algo que ya les he explicado,
y tome esta decisión, al toparme con un tuit que fue como una alarma, un aviso
de que ya no podía posponer el tema, pero antes voy a hacer un breve exposición
de repaso sobre qué es el globalismo, y cuáles son las agendas globalistas de
dominación.
El globalismo, es un proyecto de dominación global para un
nuevo orden mundial, que se propone consolidar cierto proceso de acumulación y
concentración de la riqueza que se ha desarrollado en los últimos 5 siglos a la
par con la modernidad, este proyecto pretende imponer un gobierno único mundial,
al cual no se le pueda oponer ninguna construcción de la civilización
occidental tradicional, llámese libertad, propiedad, derechos, identidad,
pertenencia, familia, incluso la personalidad, incluyendo todo lo que nos hace
humanos tanto en lo individual como en lo colectivo, y desde luego incluyendo a
Dios.
Por lo tanto tiene como fin transformar al mundo, al mundo
tal como lo conocemos, sin dejar títere con cabeza, y aquí no se salva nadie,
no se salva el capitalismo de economía y comercio reales, de economía tangible
sobre todo a pequeña y mediana escala, no se salva el liberalismo clásico que
separa estado y mercado, y tampoco se salvan todas las derivaciones marxistas
clásicas, de defensa de la clase trabajadora, como socialismo y comunismo, y
esto debe ser así, porque se trata de imponer un orden totalitario de
pensamiento único, sociedad única y gobierno único, en un mundo sin fronteras,
sin naciones, sin culturas nacionales, sin religiones tradicionales, donde el
control individual y social, y de la producción y sus modos, es total, y por lo
tanto, también se propone acabar con las construcciones de civilización que
rigen los Estados nacionales ¿y cuáles son esas construcciones? la república y
la democracia, que serán sustituidas por gobiernos centralizados elitistas, que
aplicarán un sistema positivista-meritocrático-biopolítico, basado con
cienciocracia y tecnocracia, y este sistema se plantea no solo un objetivo
colectivo de transformación de las sociedades, sino la transformación post-humanista,
transhumanista de cada individuo.
Ahora bien, este servidor insiste en la existencia de 2
agendas distintas dentro del globalismo, la globalista propiamente dicha que es
estadounidense-europea, es occidental, y la comunista versátil liderizada y
dirigida por china, que se podría decir que es tercermundista, porque se enfoca
sobre todo en países subdesarrollados o en vías de desarrollo, necesitados de
inversiones en infraestructura.
Comencemos con la agenda globalista: esta agenda se plantea
la demolición y sustitución de la civilización occidental en todo sentido, en
sus creencias, visiones, costumbres, tradiciones, religiones, pero también en
sus instituciones sociales, políticas, culturales y económicas, esta agenda se
expresa sobre todo en Europa, la Unión Europea es su máximo logro, y desde
luego se expresa en Canadá, Australia, Hong Kong, y en los EE.UU. por medio del
Deep State bipartidista, donde el partido republicano, el establishment
republicano es globalista, ahora bien, la caída de la democracia en los EE.UU. es
el próximo objetivo de esta agenda, una vez lograda la Unión Europea que es una
construcción 100% globalista, desde luego, el otro objetivo principalísimo, es
la destrucción de Rusia, el país más opuesto al globalismo en todas sus formas
y agendas, si no se logra esto, no se podrá avanzar en la incorporación
definitiva de los EE.UU. a una gran superpotencia globalista de occidente.
Desde luego, el otro objetivo del cual no podemos olvidarnos
es Israel, pero eso ameritaría todo un video aparte, como el que voy a hacer
con Rusia cuando llegue el momento propicio.
Bien vamos a la otra agenda, la otra agenda del globalismo
es la agenda del comunismo versátil planificada y dirigida por China: de ese comunismo
versátil que se expresa como modalidad en eso que Deng Xiaoping definió como “un
país dos sistemas”, Estado comunista y mercado capitalista en un mismo país, el
cual a su vez genera como modelo político de Estado y gobierno, el modelo chino
de control social totalitario de todas las clases sociales, incluyendo el
control de toda la clase social alta, y de las elites económicas y culturales,
que deben ser elites orgánicas al servicio del aparato de dominación, al
servicio de un bloque histórico imperial hegemónico. Este modelo chino de
control social absoluto en donde la sociedad es totalmente transparente y el
Estado totalmente opaco, es desde luego, el modelo que el globalismo en general
se plantea aplicar en todos los países, y en este sentido se podría afirmar que
China es una sociedad laboratorio donde este modelo se está afinando y
perfeccionando.
El comunismo versátil es el globalismo en modo chino, que se
plantea la conversión de China en la principal potencia global, en la
superpotencia del siglo XXI, China navega el mar de la felicidad globalista
pero lo hace con su propia nave, y los países objetivo de esta agenda son desde
luego los países del área Asia Pacífico, incluyendo tigres y dragones, países
del medio oriente como Irán, los países africanos y faltaría más, toda
Latinoamérica.
Que pasa aquí, que la agenda del comunismo versátil tiene
una ambición que va más allá del antiguo tercer mundo en clave marxista
leninista, y de hecho, ha logrado penetrar en muchos países de Europa y también
en los Estados Unidos, gracias a su enorme poder de corrupción, desde luego ha
penetrado en la ONU, y en muchos organismos multilaterales, pero la ONU es lo
más importante, porque que es el prototipo experimental de lo que debería ser
un gobierno único globalizado.
Ahora bien, Estas dos agendas colaboran, de hecho en cuanto
a sus objetivos bien se podría decir que son los mismos, y son claramente
convergentes, pero esto no impide que estas agendas también compitan y
eventualmente entren en colisión, en Italia, tenemos una confrontación entre
los globalistas del PD y los comunistas versátiles de 5 estrellas, aunque ambos
han formado una coalición de gobierno, en España tenemos una confrontación
entre el comunismo versátil de Podemos y de ciertos grupos radicales y separatistas,
y el globalismo representado por el PSOE y el PP, aunque en realidad, ningún
partido español se salva de la contaminación globalista.
En Venezuela el chavismo es comunismo versátil y toda la
oposición visible es globalista, en Colombia manda el globalista Iván Duque y
tenemos a Gustavo Petro como comunista versátil, en Ecuador, Rafael Correa es
comunista versátil y Lenin Moreno es globalista, como vemos entre globalistas y
comunistas versátiles, pueden darse convergencias y alianzas de mutua
conveniencia, como las hay entre familias y pandillas de un sistema mafioso
pero también hay rivalidad, competencia y en algunos casos verdadera lucha.
Por ultimo las agendas globalistas, aunque esconden el objetivo
de la imposición totalitaria global, y lo disfrazan con una promesa de “un
nuevo mundo feliz”, donde reinará la paz y la seguridad, de todas maneras han
mostrado claramente sus objetivos comunes, su hojas de ruta, y estas hojas de
ruta se pueden estudiar, son públicas, y para este servidor son cinco, las
hojas de ruta de la agendas globalistas:
1. La Agenda 21, que
es un acuerdo de las Naciones Unidas (ONU) para promover el desarrollo
sostenible a lo largo del siglo 21.
2. La Agenda 2030, también de la ONU, que contiene los Objetivos
de Desarrollo Sostenible (ODS) para el período 2015-2030.
3. El Gran Reset o Gran Reinicio, que es una propuesta del
Foro Económico Mundial de Davos, para reestructurar la economía en modalidad
sostenible, una vez superada la actual pandemia.
4. La Encíclica “Fratelli Tutti” del comandante Bergoglio, el
camarada que se encuentra actualmente al frente del Vaticano, este documento es
muy importante, y de su estudio se está encargando Aura Palermo.
5. Y desde luego por parte de China, tenemos una hoja de ruta propia
que se debe agregar, una ruta particular, que es la “Nueva Ruta de la Seda”, el
gran plan geoestratégico y geopolítico de China como Superpotencia, que a su
vez se encuentra englobado en la iniciativa “Belt and Road”, “One Belt One Road”.
Todas estas agendas y hojas de ruta, las podrán consultar en
los link que puse abajo en el texto descriptivo, bien, seguimos…
¿Por qué insisto en la existencia de 2 agendas globalistas,
la occidental y la china, por qué hago esta diferencia? porque más allá de la
diferencia cultural entre occidente y oriente, que nunca se debe desestimar,
observo una división territorial, en los países objetivo, observo, que hay una
hoja de ruta propiamente China que se expresa en la Ruta de la Seda pero
también en el grupo de los BRICS, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica,
donde Brasil, Rusia, India tienen gobiernos soberanistas, conservadores.
Observo además, que más allá de la colaboración, hay
rivalidad como ya se los he descrito, también observo que en la deriva
totalitaria de todo el globalismo, está surgiendo cierta belicosidad en China,
que es inusual para el pacifismo que debería caracterizar a todo el globalismo,
en fin, no olvidemos que en China hay un régimen de partido único,
declaradamente comunista, aunque con sus facciones en el Partido Comunista Chino
(PCC), donde una de estas facciones es liberal globalista mientras que las otras
se podrían definir como nacionalistas, incluso tradicionalistas, en fin, hay
una serie de diferencias y matices que para mí son relevantes, de hecho se
están mostrando relevantes, y con el pasar del tiempo esto podría mostrarse en
forma abierta, en forma cada vez más clara.
Bien, ahora vamos con el tuit que me llamó la atención y me
convenció para hablar sobre China, aquí lo tienen: EE.UU. sancionó a la empresa
estatal china CEIEC, a la que acusa de restringir el servicio de internet en
Venezuela y de realizar vigilancia digital y operaciones cibernéticas contra
oponentes políticos del gobierno de Nicolás Maduro, bien, este tuit nos
recordó, a Aura Palermo y a este servidor, que hace más de 2 años, en 2018,
hicimos la debida advertencia sobre este sistema de vigilancia social desarrollado
por esta empresa china y que ya estaba siendo implementado en Venezuela, y
además hicimos otra advertencia, una en donde alertamos que este sistema fue
desarrollado para constituir la infraestructura tecnológica de una nueva forma
de totalitarismo, capaz de proporcionar paz y seguridad, paz ciudadana y
seguridad para todos, un nuevo totalitarismo feliz, el cual podría imponerse no
solo en China sino en cualquier otra nación, incluso en aquellas que se jactan
de ser democráticas y constituir el “mundo libre”, de hecho, le voy a leer dos
pasajes breves de ese artículo:
El miedo no es suficiente ni es lo más eficiente, si a la
población se le convence de que vive en paz y seguridad, se puede lograr la
dominación total y perenne, incluso disfrazada de felicidad, incluso de
libertad, incluso de democracia.
Gracias a la tecnología cualquier Estado, aunque no sea
totalitario, puede alcanzar ese nivel de control absoluto y venderse como el
"guardián del bien", y convencer a la población de colaborar, esto se
logra fácilmente con miedo, pero también con un mercadeo sonriente.
Cuando escribimos esto, a la pandemia le faltaba más de un
año para aparecer...
Los invito a leer el artículo, es realmente breve, abajo en
la descripción del video encontrarán el link.
Bueno ¿y a que viene
la mención de este artículo? en medio de esta explicación sobre el
globalismo occidental y el comunismo versátil chino, bueno viene al caso por
dos razones, la primera es para demostrar, una vez más, que Aura Palermo y este
servidor, nos adelantamos, una vez más, a cualquier otro medio, en alertar a
nuestros seguidores y orientarlos en medio de la desinformación idiotizante de
analisiados y supuestos expertos, cuya verdadera intención no voy a describir
ahora, y segundo, para demostrarles que cuando exponemos un tema, es porque ya
lo hemos investigado hasta el punto de poder sostener nuestra información y
nuestras opiniones, con solidez, seriedad, credibilidad e independencia, y esto
es algo que hemos estado haciendo desde hace años, y en particular sobre el
tema de China hemos empleado mucho, muchísimo tiempo en profundizar y enfocar
nuestra investigación sobre ciertos aspectos, que no por casualidad, pocas
veces son debidamente ponderados y tratados por los medios y los expertos
mainstream.
Y esto en el caso de China es muy importante, porque vamos a
tener a China metida en el ojo del ciclón de la crisis social, institucional,
nacional que se está desarrollando en los Estados Unidos, y que es muy posible
que se extienda al escenario internacional, y esto será así, sin importar quien
logre ganar las elecciones americanas,
Ahora bien, sobre el posible desarrollo de un conflicto
entre los Estados Unidos y China, me parece importante exponer ciertos
aspectos.
Mucho se ha comentado sobre el hecho de que Joe Biden, de
resultar presidente va a inaugurar una nueva era en las relaciones entre China
y Estados Unidos, se ha especulado mucho sobre esto, sin duda alguna, seguramente
la política de Trump no se repetirá, pero... ¿qué podría significar esto? me lo
pregunto, porque la hipótesis de una confrontación fuerte con China en el caso
del triunfo de Biden, que sería un triunfo del globalismo en salsa yanqui, con
sus neocon y halcones globalistas de lado y lado restregándose la manos, bueno
la hipótesis de una confrontación fuerte con China es algo que de todos modos no
debería descartarse, por varias razones.
El Deep State y el complejo industrial militar
son los verdaderos dueños de Biden, y estos factores podrían necesitar un
conflicto, recuerden que el complejo industrial militar necesita guerras para
que su poder fáctico permanezca intacto, pero no puede ser una guerra con Irán,
no con ese Irán al que desean volver a halar hacia una mesa para renovar ese
acuerdo internacional con los iraníes sobre su programa nuclear, que es uno de
los legados más importantes de la administración de Barack Obama, así que
quitando Irán, el conflicto podría ser con China.
La administración Biden podría sentir la
necesidad de renovar el capital de fuerza, el capital coercitivo de los EE.UU.
en el ámbito geopolítico, en otras palabras, se buscaría dar una demostración
de esa fuerza sin la cual los EE.UU. dejarían de ser respetados como policías
del mundo, paladines de la democracia e interlocutores en una negociación, que
es el meollo del pensamiento neocon de los halcones globalistas, que siempre
repiten que toda muestra de debilidad por parte de los EEUU, es una invitación
a la fiesta para sus enemigos.
La otra necesidad que podría sentir la
administración Biden, es la de distraer a la opinión pública, del océano de
corrupción interna que volverá a reactivarse con la administración Biden, incluso
muchos republicanos ya están soñando con la vuelta a los buenos tiempos de los
negocios entre políticos y grandes corporaciones, de hecho, al pantano habrá
que volverlo a maquillar, perfumar y disfrazar, pero eso podría no ser
suficiente, ante un público que ya ha adquirido cierto de grado de conciencia,
por lo tanto, una buena guerra, una gran guerra, podría ser muy eficaz para
entretener al pueblo.
Como ya les comenté, desde hace un tiempo se
está dando una confrontación sorda entre globalismo y comunismo versátil, y yo
que le hago un atento seguimiento a esto, puedo confirmar que esta
confrontación se está dando en muchos frentes, en muchos países, acaba de pasar
en Bolivia donde el comunismo versátil logro recuperar el poder ante los
globalistas, en general, estoy viendo como en Latinoamérica, la propaganda
globalista arremete en su denuncia contra el Foro de Sao Paulo, pero a la vez no
ha denunciado a China con toda la fuerza que eso ameritaría, porque eso sería
sumarse a la denuncias que viene haciendo el gobierno de Donald Trump contra
China, y a esto súmenle que las inversiones chinas en Latinoamérica han sido importantes
y eso tiene su delicadeza, de todos modos, hay que andar muy atentos, porque
esto no solo está pasando en Latinoamérica, está pasando en toda Europa, en
Francia las protestas contra Macron son fundamentalmente protestas de cierta
izquierda progresista, radical, contra el globalista Macron, y algo así está
pasando en África en donde se está desatando toda una ofensiva globalista
contra China, una muestra de esto, es lo que está pasando en Etiopía.
Y escuchen atentamente: los rivales de Xi
Jinping en el Partido Comunista Chino (PCC) son globalistas, Hong Kong al igual
que su anterior metrópoli, el Reino Unido, Hong Kong y Londres están entre los
principales centros financieros del globalismo, en las protestas de Hong Kong, había
protesta genuina pero también había revolución de colores, había agentes
globalistas, y hay lideres globalistas como Hillary Clinton, que expresaron “Que
todos nos solidarizamos con el pueblo de Hong Kong en su lucha por la
democracia, la libertad de la represión y un mundo que desean ver”.
Y aquí entramos de lleno en el asunto de la confrontación
interna en China, que es muy importante que sea comprendida, por los menos en
lo que se filtra hacia el exterior, que mucha veces es una pequeña parte, y esa
pequeña parte a su vez se encuentra contaminada por la propaganda de lado y
lado, por intereses de parte que no siempre están claros.
Xi Jinping ha estado purgando al partido comunista chino en
forma intensa desde que llegó al poder, purga supuestamente justificada por casos
de corrupción administrativa, y tráficos de diverso tipos, y esta limpieza
política no ha sido solamente contra rivales políticos, y mandarines de todo
tamaño, regionales y locales, es un verdadera depuración contra el
establishment del partido, porque ha enfilado contra ciertos círculos de poder que
ocupaban la mayoría de los cargos políticos, militares y económicos, y hablando
de lo económico, también se ha enfrentado con fuerza a grandes empresarios, a
ciertos magnates, a los cuales les ha hecho saber quién manda en China. Se
estima, que esta purga ha descabezado a millón y medio entre dirigentes, gobernantes
y empleados del Partido Comunista de China, que han sido sancionados,
despedidos o arrestados por delitos relacionados sobre todo con corrupción o
malversación, y algo muy importante, en las fuerzas armadas las purgas han
llevado a la concentración del poder militar en manos de Xi Jinping.
Y sin estas purgas, Xi Jinping no hubiese logrado la reforma
constitucional que ahora le permite reelegirse por tiempo indefinido, rompiendo
con esa rotación de líderes que se había instaurado después de Mao, para
colocar al partido comunista como una entidad que debe estar por encima de sus
líderes.
Pero estas purgas además, pudieran ser la expresión de otra
confrontación en el seno del PCC, de carácter ideológico, a la cual no se le ha
dado la importancia que merece, y ahora sabrán el porqué, me explico…
Desde 1978, o sea desde los tiempos de Deng Xiaoping, el
Partido Comunista Chino considera que el país se encuentra en una fase de
transición socialista hacia el comunismo, cuya prioridad es el desarrollo de
las fuerzas productivas y la mejoría de la calidad de vida de la población,
mediante una liberalización de la economía que no
debe alterar la hegemonía del Partido en lo político, es el proyecto “un país,
dos sistemas”.
Este es el plan, pero un plan así no puede dejar de generar
contradicciones y posiciones diversas en lo ideológico, este proceso dialéctico
es inevitable, y con el pasar del tiempo ha generado tres grupos que sustentan
tesis distintas con respecto a los resultados políticos que deben resultar de
este plan, o proyecto de transición.
Y estos grupos son los liberales, los neoconfucianos, y la nueva
izquierda.
Los liberales, argumentan que la creciente prosperidad
provocada por la liberalización en lo económico, debe generar una liberalización
en lo político, mediante un proceso reformista que debe concluir en la
instauración de un sistema pluripartidista democrático. Los liberales sin
embargo reconocen que para la mayoría de la población china, “democracia”
significa la cobertura de las necesidades básicas, o sea, un sistema político
capaz de satisfacer estas necesidades básicas, de hecho, solo para un 5% de la
población, democracia significa libertad, y solo la ven en el sentido de la
libertad de expresión, esto desde luego, es lo que arrojan las encuestas
oficiales, y aquí habría que ver cuan creíbles son estas encuestas, pero desde
ya les anticipo que esta posición de la cultura china con respecto a la
libertad, es tradicional, es algo que se sabe desde hace tiempo.
Ahora vamos con los “Neoconfucianos”, este grupo es bastante
heterogéneo, y en el conviven varias tesis políticas, pero en general los neoconfucianos
se remiten a una larga “tradición confuciana” de más de dos mil quinientos años
de antigüedad, les recuerdo a mis oyentes que Confucio, nació 550 años antes de
Cristo, incluso es anterior a Sócrates, Platón y Aristóteles, y aquí no se
trata solo de Confucio, hay otros pensadores importantes después de Confucio,
que forman parte de esta tradición filosófica.
Bueno ¿qué plantean estos neoconfucianos? plantean la
unificación de las “tres tradiciones” chinas, la del Imperio, la de la
República y la de la República Popular China, la de la China comunista, y esta
síntesis debe trascender los conceptos de izquierda y derecha y debe llevar a
la renovación del partido, donde el confucianismo debe convertirse en una
especie de religión civil, de la misma manera que el protestantismo, tuvo su
desarrollo político en los EEUU, desembocando en conceptos como “el destino
manifiesto” y el “excepcionalismo” americano.
Y esto que proponen los neoconfucianos es muy importante, el
expansionismo chino tiene su propia visión de “destino manifiesto” y
“excepcionalismo”, China se ve a si misma como una potencial ideal que debe
cumplir una tarea y una función en el mundo, tal cual como lo hacen los Estados
Unidos, y cuando me refiero a China y a los Estados Unidos, me refiero a sus
elites iluminadas, las que conciben sus naciones no solo como sociedades
perfectas sino con el imperativo moral de que deben ser modelos para el mundo,
que deben difundir y exportar la buena nueva, evangelizar al resto de las
naciones.
Por eso es que no me canso de afirmar que una cosa es el
globalismo occidental, centrado en los EE.UU. como protector de un eje que supuestamente
debería extenderse desde América hasta Rusia (si logran eliminara a Putin), y
otra cosa es el globalismo chino, el del comunismo versátil, que sabe que la
destrucción cultural que se propone el globalismo occidental es un
debilitamiento que juega a su favor, es un autogol, y por lo tanto en ese juego
donde ellos proponen no una destrucción sino una síntesis, tienen mucho que
ganar.
En fin, seguimos, por último, está el grupo de la “Nueva
Izquierda”, este también es un grupo con variantes, el cual defiende las
políticas de transición socialista del partido comunista, que han ocurrido en
los últimos cuarenta años, pero también defienden el legado de Mao, por lo
tanto, argumentan que se debe reconocer que la gran particularidad del
socialismo chino, es que carece de un modelo preconcebido, y esto debe
aceptarse, tal como Mao lo aceptaba cuando afirmaba que “Las cosas en el mundo
son complejas y las deciden diversos factores”, por lo tanto el proceso dialéctico,
debe proseguir.
Ahora bien, sobre todas estas corrientes de pensamiento,
sobre todas estas tesis, flota una síntesis que es el “Pensamiento Xi Jinping”
que es toda una doctrina y plantea una síntesis del pensamiento tradicional
chino (especialmente el de la tradición confuciana) con la modernidad
representada por el marxismo, en donde se debe evitar la imitación de modelos
políticos occidentales como el liberalismo, y se debe hacer una revisión de la
tradición desde un enfoque pragmático y moderno, donde de todos modos, el
pensamiento marxista de raíz maoísta debe servir de guía teórica.
Y esto en la práctica significa que el actual período de
transición entre el modo de producción capitalista y el modo de producción
comunista, debe ser dirigido en todo momento por el partido. Y aquí cabe
recordar que en 2017, se acordó incorporar el “Pensamiento Xi Jinping” como doctrina
que debe formar parte de la Constitución del Partido Comunista Chino, y esto es
algo que solo había pasado antes con el “Pensamiento Mao Zedong”, mientras que
los aportes de Deng Xiaoping y sus sucesores solo se consideran como “teorías”,
en otras palabras, como algo de menor jerarquía doctrinaria.
Bien, como podemos apreciar la lucha de Xi Jinping por
ascender hacia un poder sin precedentes, se está dando en todos los terrenos, y
no se trata solamente de un ajuste con sus rivales directos, esto va más allá, y
se proyecta como algo que debe establecer un antes y un después, y como veremos
más adelante, esto podría tener que pasar por un conflicto de alcance
impredecible.
Pero antes, volvamos al tema de la relación de China con EE.UU.,
porque después de haberles expuesto la guerra política interna que se está
dando en China, me interesa enfocar ciertos aspectos desde otro ángulo, a ver
si me siguen…
A estas alturas, nadie puede dudar de la penetración china
en EEUU, penetración comercial, económica, financiera, hay penetración académica
en las universidades, penetración cultural en la industria del entretenimiento,
y por si esto fuese poco, se han establecido muchas alianzas estratégicas de
intercambio y negocios con algunos Estados, como por ejemplo, con el Estado de
nueva york, pero hay otros estados, muchos estados, sobre todos los gobernados
por demócratas, que han establecido estrechas relaciones con China, y todo esto
para no hablar de la penetración comunicacional en medios tradicionales y digitales,
y esto para no hablar de la penetración informática, a pesar de todos los
esfuerzo de la administración Trump por tratar de detener estas intromisiones.
Pero... ¿Cuándo comenzó todo esto? esta es una historia larga,
habría que retroceder décadas, hasta llegar a los años setenta y no es mi
objetivo hacerlo hoy, sepan de todos modos, que esta China, con su modelo “un
país dos sistemas”, también es una obra del globalismo, una obra cuyo autor
principal es uno de los ideólogos fundamentales del globalismo, Henry
Kissinger, pero hoy no quiero prolongarme más allá de lo sensato, así que
retrocedamos solamente hasta al gobierno de Barack Obama, que fue también el
gobierno del Joe Biden como vicepresidente y también el de Hillary Clinton y
John Kerry como secretarios de Estado.
¿Qué fue lo que ocurrió durante esa administración con
respecto a China? Pues la impresión que se tiene al hacer una investigación
incluso superficial, es que ocurrió una aceleración de la penetración china en
EE.UU. que algún día será probada debidamente, algún día podrá ser revelada, y
que podría constituir incluso, un caso de traición a la patria, y digo esto porque
esta penetración, que podría incluir activos sensibles, activos de valor
estratégico, terminó por comprometer la seguridad nacional de los EE.UU. así
como lo oyen.
Pero enfoquemos nuestra mira, en alguien que podría ser el
próximo presidente de los EE.UU., Joe Biden, ahora todos sabemos que es muy
probable que la familia Biden, Biden padre por medio de su hijo Hunter, al
parecer hicieron jugosos negocios con China, negocios de tráfico de influencia
sobre todo, pero ahora que también sabemos cómo es la situación interna en
China, la situación política interna, nada tranquila, seria lícito preguntarse con
cual parte de la dirigencia China hicieron negocios los Biden. Sería muy
interesante saber esto, porque el PCC y sus miembros, especialmente sus
miembros más prominentes y acaudalados, los más liberales, los más corruptos, a
lo mejor no cuentan con el blindaje necesario frente a Xi Jinping y sus
tendencias purgatorias, con las cuales ha venido golpeando a ciertos magnates,
también para enviar ciertas señales, faltaría más, porque es posible que el “Estado
profundo” chino no coincida totalmente con el PCC ¡cuidado con esto!
Y ahora para terminar, vamos a un último punto, que podría
ser muy importante en los próximos tiempos, y es el giro que Xi Jinping le ha
dado a su política exterior, un giro a contrapelo de toda su política exterior
anterior, la cual a su vez representaba una innovación con respecto a la de sus
antecesores, me explico: la política exterior china antes de Xi Jinping era una
política de bajo perfil, hasta el punto que muchos analistas internacionalistas
llegaron a concluir que China carecía de política exterior, después llega Xi
Jinping y esto cambia, y China comienza a actuar en el escenario global en
forma abierta, tratando de ejercer una fuerte influencia geopolítica mediante la
difusión de cierto modelo chino de exportación, que no solo es político, sino económico,
tecnológico y cultural.
Pero a partir de 2016 ocurre un notable de actitud, por
ejemplo, las reclamaciones territoriales chinas se vuelven cada vez menos
diplomáticas, hasta incurrir en excesos que realmente sorprenden a la comunidad
internacional, y a partir del año pasado, y sobre todo a partir de este año, se comienza a observar un
nivel de agresividad y belicosidad realmente preocupante, que no es solo hacia
afuera, porque hacia adentro, ha comenzado una operación de propaganda que se podría
definir perfectamente como una operación de exaltación patriótica y
nacionalista, a este asunto yo le dediqué un video “Breve reflexión sobre
China, Hong Kong y el fatalismo de la dualidad”, en el cual abordo esta
situación y otros temas relacionados, el link lo encontrarán abajo en el texto
descriptivo.
Ahora
bien, ¿Por qué Xi Jinping ha dado este golpe de timón hacia aguas
tempestuosas? Abandonando el modo chino de conquista del mundo en forma
pacífica? a que se debe esta actitud armamentista, belicista, agresiva, hacia
sus vecinos?
En el video que le dediqué a la historia cíclica, “La
historia y sus ciclos, ante el final de los tiempos”, cuyo link también
encontrarán más abajo, me voy con la hipótesis de que la sabiduría china
ancestral, posee un conocimiento profundo de la historia, y por lo tanto saben
perfectamente que la historia tiene sus ciclos, por lo tanto, saben que estamos
entrando en la fase crítica, conflictiva y terminal, de un ciclo histórico,
donde los conflictos serán inevitables, porque serán conflictos naturales, y
por lo tanto, se están preparando para enfrentar estos conflictos que podrían
presentarse a toda escala, social, nacional e internacional.
Señores, China es el resultado de una civilización
milenaria, que tiene más de 4.000 años de historia, los chinos saben que la
historia es cíclica, y se están preparando para un giro de crisis, un giro de
cierre de un ciclo histórico, quizás de un gran ciclo histórico… Xi Jinping, ni
más ni menos, se está preparando para enfrentar el 4to giro.
De todas maneras y con respecto a los chinos se vale tener
en cuenta, que China es un país hermético, recuerden que hay 3 países herméticos:
Rusia, China, el Vaticano, son países que obedecen a la famosa definición que
Churchill dio sobre Rusia, cuando dijo que Rusia “es un acertijo, envuelto en
un misterio, dentro de un enigma”.
Bueno amigos y seguidores, es todo por hoy, hacer un video
sobre China que no dure horas, es toda una proeza, pero espero por lo menos
haberles transmitido lo esencial, para comprender lo que podría pasar con
China, en tiempos que podrían presentarse más temprano que tarde, y faltan
muchos otros temas, indispensables para poder tener una visión de conjunto, una
visión más panorámica de lo que se está desarrollando casi que minuto a minuto
no solo en los EE.UU. sino en muchas partes del mundo, así que nos veremos
pronto, muy pronto, hasta luego.